18 abril 2010

¿Nube de cenizas volcánicas o manipulación con fines oscuros?

Desde hace cuatro días, el tráfico aéreo de Europa está prácticamente paralizado a causa de una nube de cenizas volcánicas procedente de Islandia. Sin embargo, en el día de hoy aumentan las críticas por parte de las líneas aéreas por la falta de datos objetivos y el cierre del espacio aéreo sobre la base de meras hipótesis de simulación.

En este sentido y según afirmaciones del portavoz del grupo hechas este domingo en Fráncfort del Meno, Lufthansa ha exigido mediciones fiables para el espacio aéreo alemán, ya que hasta la fecha no se han facilitado datos concretos sobre los verdaderos efectos de las erupciones volcánicas en Islandia. Según dicho portavoz, no es posible fiarse solamente de los datos procedentes del centro de seguimiento de las cenizas volcánicas de Londres y que es necesario mejorar el sistema significativamente.

En el día de ayer, Lufthansa realizó diez vuelos de traslado de aviones sin pasajeros desde Munich a Francfort con el fin de estar preparada para la reanudación de los vuelos y disponer de aviones suficientes para atender a los pasajeros retenidos en los aeropuertos. "Los aviones volaron a una altura de 8.000 metros y,por tanto, dentro de la zona crítica. Luego, en Francfort los técnicos no encontraron el menor indicio de rayaduras en cristales, cubierta exterior o turbinas. Similares experiencias ha tenido la companía holandesa KLM", dijo el portavoz Klaus Walther.

Mientras tanto, el ministro federal alemán Peter Ramsauer anunció que el lunes por la tarde saldría un avión de mediciones con científicos del Instituto de Física Atmosférica de Oberpfaffenhofen. Hasta la fecha, los globos meteorológicos no habían sido equipados con sondas para la medición de las concentraciones de ceniza volcánica, por lo que no servían para invstigaciones sobre seguridad aérea. Es bastante difícil de entender que se haya tardado cuatro días y no se hayan realizado mediciones desde el primer día, ya que los institutos de investigación científica de toda Europa disponen de dispositivos de medición. Foto: Mapa de la nube de cenizas: Concentraciones altas en zonas claramente definibles.

También la asociación de pilotos Cockpit ha criticado que en Alemania se prohibiera la navegación aérea sin disponer de datos de medición de las concentraciones de ceniza. "Pensaba que en Alemania ya habían realizado vuelos de investigación por parte del Centro Alemán de Navegación Aérea y Espacial. Si tales vuelos no se realizan antes del lunes, lógicamente es demasiado tarde", dijo el portavoz de Cockpit Jörg Handwerg al diario berlinés Der Tagesspiegel. "Partía de la base de que se había investigado con la debida diligencia para tomar la decisión de cerrar el espacio aéreo", continuó. 

A raíz de estos acontecimientos, que han casusado ya varios cientos de millones de pérdidas, cabe preguntarse si debe existir un único centro de control del espacio aéreo europeo cuando éste basa sus decisiones en criterios arbitarios derivados de meras simulaciones de ordenador y no en datos fehacientes. Argumentar que las partículas contendrían tanto vidrio que podrían inutilizar las turbinas de avión en toda Europa y que las concentraciones de partículas de una nube de cenizas sería igualmente arriesgada en Islandia que en una extensión de varios miles de kilómetros cuadrados resulta bastante inverosimil. No será lo mismo atravesar una nube de cenizas de alta densidad que un cielo limpio con partículas dispersas de las que ni siquiera se sabe cuál es su composición. Dejar Europa a merced de un centro de control que sólo decide sobre datos de simulación es dejar a Europa a merced de interesas poco transparentes y de personas que a todas luces parecen actuar de forma arbitaria y dilentante.

No olvidemos que ciertos grupos de intereses como CFR y Bilderberg, que controlan las altas esferas de la UE y sus nada democráticas instituciones, tienen mucho interés en crear situaciones de pánico y de perjudicar las economías nacionales. Fracasaron con la Gripe A, y ahora podrían intentar aprovechar un fenómeno natural para aumentar aún más su control sobre todo un continente. La prohibición bastante arbitraria de volar en casi todo el espacio aéreo europeo no responde a intereses de seguridad, sino de control y manipulación. Foto: Mapa del parálisis aéreo en Europa. Es éste el nuevo orden mundial?

Sería deseable una mayor desconcentración del poder en Europa y una mayor autonomía de los países europeos para evitar futuras decisiones que ante todo perjudican a los intereses de los ciudadanos. El parón aéreo en Europa muy bien puede haber sido un ensayo general más para ver hasta qué punto se puede controlar la vida no sólo de Europa, sino de medio planeta, con sólo crear una situación de pánico ante unos peligros bastante inciertos, se trate de una gripe inexistente o de un volcán en erupción. Si éste es el nuevo orden mundial, es preferible volver a estructuras que lo evitan. La soberanía nacional debe prevalecer frente a un control por instancias superiores sin base democrática.

Según acaba de informar Lufthansa Cargo, los aviones de transporte que han recorrido trayectos largos como Estambul-Francfort no han presentado ningún tipo de desperfectos a pesar de que todo el espacio aéreo estaba supuestamente intransitable por la nube volcánica.




2 comentarios:

Concepción Rozalén dijo...

Yo creo que no existen fines oscuros, es más el miedo que tienen de que se estrelle algún avión y la gente se les eche encima. Saludos.

barcelonaona dijo...

Estoy de acuerdo con Conchita. Solo falta que nos pongamos más paranoicos de lo que ya estamos.