13 octubre 2012

La Hispanidad, bajo mínimos


La Monarquía necesita ya un cambio generacional
La fiesta nacional del Reino de España, que también lo es en algunos, aunque cada vez menos, de los países que antaño eran colonias españolas, está bajo mínimos, y no sólo por razones presupuestarias.

El día de ayer estuvo marcado por una manifestación -que difícilmente se puede llamar multitudinaria- en la Plaza de Cataluña de Barcelona, en la antigua provincia aragonesa del Condado de Barcelona, en contra de la independencia que persigue el actual gobierno nacionalista-conservador de Cataluña bajo la presidencia de Artur(o) Mas, quien continúa por la senda ya marcada y preparada por el anterior gobierno tripartito formado por PSC, ERC e IU-ICV.

El desfile en Madrid se había limitado casi sólo a las tropas. Tampoco tiene sentido gastar mucho dinero en desfiles militares, tal como están las cosas. Y la situación en Cataluña y las Vascongadas no invita, precisamente, a festejar nada. Incluso se rumorea que S.M. el Rey reprochara al primer ministro Rajoy la incorrección política del ministro Wert, quien había pedido "españolizar" Cataluña, aunque todos entendemos qué quería decir con ello (no lo que interpretan la izquierda feroz y el bando separatista catalán), aunque la Casa de S.M. el Rey ha desmentido que fuera eso lo que dijera el Rey a Rajoy.

Quizás haya sido una de las celebraciones de la fiesta nacional más pobres de todos los tiempos. Sólo se recuerdan desfiles mínimos de los tiempos de Felipe González, cuyo partido no era ni es partidario de enfatizar la españolidad de España. 

España se parece cada vez más a la del desastre de 1898, cuando se perdieron las últimas colonias -a excepción del protectorado de Marruecos, del Sáhara Español y de Guinea Española. También entonces el desastre del país se debía a la ineptitud de los políticos de turno, y cuando ésta se lleva al extremo, siempre acaba en pérdida de territorios. Sólo queda por saber cuándo se producirá el desastre. Diría que en el 2014 o 2016, ya que, según Artur(o) Mas, el referendum lo quiere convocar en cuatro años.

Arturo Mas: ¿Revista fúnebre?
La manifestación contra la independencia en Barcelona registró una asistencia bastante escasa. Todo indica que la causa española está perdida en Cataluña. Ya no quedan fuerzas y sólo cabe adaptarse a los hechos consumados o emigrar de Cataluña.

Los políticos españoles llevan treinta años saboteando todo lo que suene a España. Los resultados son palpables. Hispanidad, bajo mínimos.