07 noviembre 2014

nueve de noviembre - veinticinco años de una alemania entre traumas, mentiras y traiciones

prusia un pueblo sin tierra







las tierras arrebatadas de brandemburgo oriental


las tierras arrebatadas de pomerania

las tierras arrebatadas de prusia occidental

las tierras arrebatadas de danzig

las tierras arrebatadas de prusia oriental

las tierras arrebatadas de memel

las tierras arrebatadas de silesia

las tierras arrebatadas de los sudetes


tierras vilipendiadas anexionadas quemadas



un pueblo expulsado zarandeado asesinado humillado

una guerra que acabó castigando a los que menos culpa tenían. una guerra deseada e instigada con mucha antelación al establecimiento de la dictadura. una dictadura al servicio de los enemigos preparó el camino para acabar con una nación de naciones. un plan largamente trazado para eliminar a un país un pueblo sus ciudades sus gentes.


alemania llegó a existir como estado federal gracias a prusia pero prusia fue convertida en la cabeza de turco para obtener el control de centroeuropa.



potencias extranjeras decidieron borrar del mapa a todo un país y arrebatarlo a su pueblo. para hacerse con sus tierras limpiadas de sus habitantes. para acabar con una cultura milenaria.

¿justifica una guerra iniciada y perdida por una dictadura inhumana consentida por oposición y potencias extranjeras para luego usarla como excusa para arrasar un pueblo y su patrimonio cultural y arquitectónico que un país una nación de naciones tenga que perder el 40% de su territorio?


¿cómo se justifica la expulsión de millones de prusianos de sus tierras por una guerra ideada ejecutada impuesta por un dictador de origen austriaco?





¿sólo porque el pueblo alemán es sumiso al poder imperante?

¿no es lo mismo que ocurre en venezuela hoy en día? llegará la guerra y se justificará la destrucción del ogro previamente consentido sostenido apoyado por la comunidad internacional.


el horror
el horror
el horror


pueblos traumatizados
generaciones infelices
un país erradicado del mapa
un pueblo disuelto
una cultura perdida


hace veinte años los vencedores soviéticos decidieron volver a unir su zona de ocupación con lo que eran las zonas de ocupación americana británica francesa





¿por qué?


porque su zona de ocupación no daba más de sí. porque sus satélites no daban más de sí. porque su imperio estaba podrido y no daba más de sí.


vendieron un caramelo envenenado a los alemanes occidentales
y les impusieron lo que llaman reunificación


es mentira
es mentira
es mentira


no fue ninguna reunificación
se camufló como tal lo que no lo fue



fue una estafa
fue un engaño
fue una farsa

fue una adhesión de un territorio dividido previamente en cinco estados y medio para fingir lo que no era y saltarse la ley fundamental. se trataba de saltarse al pueblo alemán para ejecutar un plan al margen de la voluntad popular. el nuevo orden mundial así lo quería. se trataba de evitar una asamblea constituyente y tener que someter a un plebiscito la aprobación de una constitución de la que carece alemania. sólo tiene un sucedáneo que en mil novecientos cuarenta y nueve se redactó por la graciosa concesión de los británicos por una asamblea constituyente no soberana en una zona neutral y pensada para un conglomerado de estados federados diseñados sobre el mapa por los británicos. se trata de que los alemanes perdieran su identidad y su arraigo no respetando los territorios históricos que conformaban lo que había sido el imperio de 1871 creado por bismarck y vilipendiado por la dictadura.

fue una adhesión que no respetó a los que perdieron...


...sus derechos
...su tierra
...su vida
...su libertad
...su infancia





fueron oprimidos
fueron encerrados
fueron despojados
de todo lo que había sido suyo




en una zona ocupada por los soviéticos 
hasta mil novecientos noventa...

...los rusos sabían muy bien lo que hacían al preparar el montaje que llaman reunificación. aquello no fue obra de un pueblo ni de ninguna revolución tranquila. fue un plan trazado años antes y ejecutado por moscú.

...pusieron a alemania occidental en un aprieto sin salida sin marcha atrás. impulsaron la huida masiva de los habitantes de su zona de ocupación vía hungría. la solución sólo pudo ser la disolución del estado que disimulaba la zona ocupada en el centro de alemania.

...los rusos sabían que los políticos alemanes traicionarían nuevamente a su pueblo no exigiendo la reparación del daño causado durante tantas décadas. no en vano eligieron el nueve de noviembre para abrir el muro de berlín.


el nueve de noviembre
el nueve de noviembre
el nueve de noviembre


tal día de mil novecientos dieciocho los políticos alemanes traicionaron a su pueblo firmando un tratado que estableció reparaciones que aún se están pagando. un tratado que sentó las bases para una nueva guerra que acabaría definitivamente con alemania como potencia continental.

tal día de mil novecientos treinta y ocho tuvo lugar uno de los hechos más deplorables que acabaron definitivamente con lo que quedaba de libertad y dignidad en la alemania dominada por los nacionalsocialistas: la noche de los cristales rotos que puso fin a la libertad de judíos alemanes y a la cúpula histórica del parlamento imperial nunca recuperada.

y tal día de mil novecientos ochenta y nueve se abrió el muro y comenzó la tercera traición. un pueblo sin soberanía no podía negociar sólo aceptar. pero los políticos no podían actuar cerrando un ciclo inconcluso. nadie representaba la alemania que sucumbió en versalles. nadie representaba la alemania que acabó en dictadura. nadie tenía la legitimación para negociar nada.




negociadores ilegítimos negociaron un nuevo tratado ilegítimo traicionando a su pueblo renunciando a territorios y renunciando a derechos. negociadores que impidieron al pueblo que decían representar que se diera una constitución y que validara o rechazara lo negociado con las potencias vencedoras. negociadores que establecieron acuerdos secretos para preservar prebendas privilegios e impunidad a los que pertenecían al régimen opresor de la zona soviética. negociadores que eran vendedores de la dignidad de su pueblo.



traición
traición
alta traición


traición ejecutada por quienes no tenían visión inteligencia estatura. palurdos provincianos que se creían estadistas sin llegar a ser más que mequetrefes engreídos aupados a posiciones que no merecían y utilizados por el nuevo orden mundial.

así llegó lo que llaman reunificación. sin intervención del pueblo. sin validación por el pueblo.


hechos consumados
hechos consumados

hechos consumados


hechos consumados como el vilipendio humillante...







...de tempelhof

de los símbolos:

de la nación
de la libertad
de la dignidad



un pueblo sin constitución




¿es soberano?


un pueblo sin constitución




¿tiene dignidad?

un pueblo desheredado




¿es libre?


el pueblo alemán es un pueblo tutelado que vive a merced de sus mercedes autoinstituidas en negociadores en nombre de un estado que no representaban porque no lo podían representar porque faltaba la continuidad entre uno y otros porque carecían de legitimidad para hacerlo porque existen intereses que quieren impedir que sea el pueblo quien decida su destino su realidad sus reivindicaciones y sus renuncias.


hechos consumados

hechos consumados

hechos consumados





en mil novecientos cuarenta y cinco se establecieron fronteras provisionales que no fueron respetadas. fronteras que fueron reconocidas por quienes no tenían facultades para hacerlo porque no estaban legitimados para hacerlo. sólo el pueblo puede decidirlo conjuntamente. pero el pueblo no decide porque carece de constitución de soberanía del derecho de decidir. el nuevo orden mundial no quiere derechos para los pueblos ni democracia. quiere esclavos y dictadura.



la fusión de la zona soviética con alemania occidental se hizo mal. se establecieron condiciones inaceptables. se estableció una discriminación justificada con razones económicas de productividad. pero los derechos de un pueblo no se pueden medir con criterios económicos. tampoco se midieron los desajustes y descontroles con criterios económicos. el coste habría sido el mismo que el que hubo que asumir si se hubieran igualado en derechos a todos y restableciendo derechos perdidos durante la posguerra durante la dictadura del austriaco durante la dictadura soviética del este.




igual que el nueve de noviembre de mil novecientos dieciocho el mismo día de mil novecientos ochenta y nueve se sentaron las bases para la división el desencuentro la tensión constante. sólo que esta vez dentro del mismo país entre una parte y la otra parte del mismo pueblo que ya no era realmente el mismo pueblo. al menos no lo era del todo. porque cuarenta años de lavado de cerebros crearon una identidad distorsionada en el este. un espejismo de identidad lo suficientemente eficaz como para crear nuevas tensiones.


los negociadores o no se dieron cuenta o eran así de lerdos. o así de sádicos. o se habían  vendido de antemano a los enemigos. al nuevo orden mundial. igual que los nazis se vendieron a los enemigos vendiendo un país que no era suyo un pueblo que no representaban una historia que falsificaban una cultura que les importaba tres pimientos.

la reunificación es una farsa una mentira un cuento chino. ahora van a celebrar los veinticinco años de la victoria del pueblo que ni luchó ni venció a nadie sino que hizo el indio. ya en mil novecientos ochenta y nueve esa certeza se palpaba durante las fiestas bizarras de año nuevo bajo la mil veces vilipendiada puerta de brandemburgo. algo de los discursos no cuadraba y sigue sin cuadrar.  abuela krenz ya lo dijo hace unos días: la orden vino de moscú.



celebramos lo incelebrable. porque no se puede celebrar una humillación. porque no se puede ser feliz habiendo sido estafado. porque no se puede festejar que hoy se sientan comunistas opresores en parlamentos democráticos y que aparatchiks comunistas sigan ocupando tierras empresas casas arrebatadas a sus legítimos propietarios durante una ocupación una dictadura inhumana que duró cuatro décadas. porque no se puede olvidar que destrozaron vidas familias patrimonio cultural sin el menor atisbo de humanidad. porque no se puede celebrar que los que pegaron tiros en el muro y asesinaron vilmente a ciudadanos a los que negaron la libertad de decidir dónde y cómo vivir vivan hoy tan tranquilamente. porque no se puede celebrar que los altos funcionarios comunistas opresores reciban hoy pensiones de honor elevadísimas a costa de los contribuyentes occidentales.


no se puede celebrar una farsa

una farsa

una farsa

una farsa

la reunificación no existe nunca ha existido




porque prusia dejó de existir


no fue el pueblo no fue un acto espontáneo




el muro no cayó se abrió por orden de moscú


que no nos mientan más





alemania es esclava de rusia y de bilderberg
gobernada por un topo soviético




alemania adios
prusia en cenizas

sólo cenizas serán lo que quedará 
con el nuevo orden mundial
del socialismo fabiano


Notas: Estilo literario a modo de Alfred Döblin (como en 'Berge Meere und Giganten', lo vertiginoso y abismal de los acontecimientos) y Georg Trakl (en lo que se refiere al enfoque pesimista). Los colores utilizados son en primer lugar expresión del pesimismo y la tristeza, pero también representan los de Prusia, los la monarquía federal de 1871, pero también los de la república actual: negro blanco / negro blanco rojo / negro rojo dorado. Los uso según la pretensión del texto: hechos, preguntas, afirmaciones, exclamaciones, denuncias. El diseño del texto se ajusta a las limitaciones del editor y de los artilugios empleados. El estilo del diseño no sigue ninguna referencia anterior, es creación propia. La idea es la fusión entre texto de ensayo y 'poesía prosáica' moderna.



Artículo relacionado: La farsa de la reunificación alemana y la injusticia con Prusia




06 noviembre 2014

La farsa de la reunificación alemana y la injusticia con Prusia

Artículo escrito en 2009, pero igual de actual que entonces

La mal llamada reunificación de 1990 tras la caída del Muro y del Telón de Acero (ordenada por Moscú) fue una farsa preparada con mucha antelación.
Por una parte, la potencia vencedora de la Unión Soviética quería librarse de los estados satélites del bloque del este, completamente arruinados por una gestión nefasta de la economía, sin sufrir por ello un verdadero perjuicio. Por tanto, era evidente que se iba a ayudar a los alemanes para lograr la ansiada reunificación al cargar a la República Federal de Alemania el estado en quiebra de la Alemania Central, sumido en un estado de posguerra, y encima recibiendo dinero por ello. Los alemanes ya lo harán, dirían entonces Gorbachov y camaradas, y también son lo suficientemente tontos como para verlo encima como una concesión generosa de la Madrecita Rusia. Foto: La traición firmada y sellada y los alemanes engañados como chinos: Hecho grrran negossio (Gorbachov) - Ei, gude, isch bin 'n eschte Bismack - en palatino-moguntino: Toma ya, estoy hecho todo un Bismarck (Kohl).

A todo ello precedió toda una farsa carnavalesca bien planificada. En primer lugar aparecieron los turistas veraniegos procedentes de la zona de ocupación oriental que sorprendentemente se apercibieron de que la frontera húngara resultaba ser más permeable de lo habitual (los alemanes del este no podían traspasarla en dirección oeste). Ahora bien, desde la represión violenta de sus ansias de libertad en 1956, los húngaros gozaban de cierta autonomía, sobre todo durante los últimos años de la dominación por la Unión Soviética, pero que cerrasen de repente ambos ojos en materia de tránsito transfronterizo hacia Austria sí que parecía un poco llamativo. Teatro de farsas en Berlín oriental: Schabowski abre la frontera demasiado pronto - "por un despiste" - posiblemente tras una pregunta en clave de uno de los periodistas presentes en la rueda de prensa con motivo de la nueva Ley de Viajes.

De esta manera, el oeste de Alemania se llenó cada vez más con habitantes de la zona de ocupación oriental, lo que puso al país bajo una presión creciente, porque los alemanes de la zona soviética incluso pretendían solicitar asilo para quedarse.
Al mismo tiempo, eiverbibsch (1), comenzó a protestar por allí y por allá un movimiento ciudadano de formación espontánea, sobre todo en Sajonia, una región que ya bajo la dictadura nacionalsocialista tendía a aclamar al régimen, y más tarde, tras el cambio del régimen (¿o fue más bien sólo un cambio de los símbolos y nombres políticos?), también aclamaba al régimen opresor comunista, que en realidad sólo fue la continuación del régimen nazi bajo una nueva denominación social, cuya abreviatura "DDR" se parece sorprendetemente a "Tercer Imperio Alemán", es decir "Drittes Deutsches Reich". Dicho movimiento ciudadano tenía la osadía de atribuirse como éxito suyo la decisión de Moscú sobre la devolución de la zona de ocupación soviética a la Alemania residual de la República Federal de Alemania, lo que este movimiento celebraría como la "revolución pacífica". Nuuu (2).
(1) eiverbibsch (sajón) = ¡toma ya!; (2) Nu (sajón) = exclamación tipo "bueenooo..."

Lo que es un hecho es que no se trataba de ninguna decisión del pueblo. A ello se añadía que las potencias vencedoras occidentales no tenían una visión tan abierta del asunto, sobre todo el Reino Unido y Francia, los dos países que más han odiado a Alemania en todos los tiempos, si no tomamos en consideración a Polonia, que supera a ambos. Por añadidura se sumó la traición por parte de los políticos alemanes de provincia, cuya visión política no llegaba mucho más lejos que a la otra orilla del río Rin en Bonn. Precisamente el Canciller Federal Kohl, originario del Palatinado, antigua provincia bávara integrada tras la guerra en el estado artificial de Renania-Palatinado, y que ya sólo por su origen como no-prusiano era un enemigo en potencia de Berlín y de Prusia (de hecho tardó ocho años en habilitar Berlín como sede del gobierno y nunca ocupó la nueva cancillería en el río Spree). Junto a su ministro Schäuble (ese de origen suebo que quiere abatir aviones de pasajeros si hay sospecha de terroristas a bordo, entre otras lindezas), que parece anclado de por vida a la poltrona ministerial y que estuvo encargado de traicionar los intereses alemanes en las negociaciones 2+4 sobre la simulación de reunificación, Kohl era un jefe de gobierno lo menos idóneo para poder hacer frente a la carga de la reunificación que de repente había caído sobre sus espaldas. Quería emular a Bismarck, pero apenas logró llegar más lejos de lo que hubiera llegado un gobernador provincial bávaro del Palatinado. Foto: Los trapicheos de Kohl con el partido del bloque (3) CDU del este, aquí con el trapichero mayor de la RDA y flauta del bloque (4) de Maizière.
(3) Partido del Bloque: En la "RDA" existía una simulación de pluralidad política. El bloque comunista del partido comunista SED (después PDS y hoy Die Linke) estaba formado principalmente por el SED, pero también por partidos con nombres de partidos occidentales como CDU, LDPD (= FDP), NDPD (= NPD) y DBP (Partido de los Campesinos). En el este se sabía ya bastante de farsas... (4) Los políticos de los partidos del bloque se llamaban popularmente "flautas del bloque", porque sólo tocaban la música de acuerdo con lo que ordenaba el SED.
Al margen de todo ello, en 1989 los políticos alemanes no sólo carecían del necesario coraje político, sino también de una conciencia de identidad respecto de la historia alemana y la anexión de los territorios del este de Prusia por parte de Polonia, Rusia y la actual Lituania, (entonces aún en la URSS) algo completamente contrario al derecho internacional, pero como dichos territorios habían sido de Prusia, no parecían tener mayor interés.

Así se explica que -en contra de todo sentido común- se incluyera a Polonia en las negociaciones sobre la "reunificación", como si se tratara de una parte negociadora en igualdad de derechos.
El tembleque de Polonia tenía sus motivos, y aún hoy está tiritando por ser consciente de que prácticamente la mitad de su territorio no es parte de Polonia, sino que pertenece a Prusia, mientras que no tiene el valor suficiente para recuperar sus propios territorios orientales pertenecientes hoy a Ucrania, entonces aún dentro de la URSS (claro que los de Prusia son mucho más apetecibles económica y paisajísticamente). Pero en fin, con los zopencos provincianos del oeste de Alemania lo tenían mucho más fácil. Foto: Kohl con Bush en la cumbre del G-7. Sorry, that's Moscow's decision.

El resultado de toda esta farsa carnavalesca alrededor de la presunta reunificación fue que no sólo se saltaron la Ley Fundamental (esa pseudo-constitución impuesta en 1949 por los británicos y modificada cada dos por tres según antoja a los políticos), ya que dicha ley establecía claramente las reglas para tal suceso (Asamblea Constituyente, Refundación de Alemania), sino se dejó también fuera de juego al Tratado de Potsdam, que era la causa de que Polonia sudara la gota gorda, porque si se hubieran llevado las negociaciones en el sentido de dicho tratado, no podrían haber evitado la devolución de Pomerania, Silesia, el este de Brandemburgo y Prusia Oriental (en las fronteras de 1918) - Prusia Occidental, el Territorio del Memel y Posen ya se habían perdido en dicho año. Para más inri, Kohl no fue ni capaz de corregir los abusos polacos respecto de la línea de los ríos Oder y Neisse (en 1945 se había establecido como límite el río Neisse oriental y no el occidental), pues aún reconociendo como un hecho inamovible la pérdida de la mayor parte de los territorios del este, la anexión del este de Brandemburgo y del oeste de Silesia, así como de la ciudad de Stettin (al oeste del río Oder) sí que son totalmente ilegales. Mapa: Prusia dentro de las fronteras alemanas de 1900.

Entonces tuvieron la gloriosa idea de dividir la zona de ocupación soviética primero en 5 nuevos estados federados (igual de artificiales como los occidentales, diseñados sobre el mapa por los británicos) para solicitar y aprobar después su adhesión a la República Federal de Alemania, truco con el que se esquivó con picaresca la Ley Fundamental (la cual modificaron luego eliminando todo vestigio de tales disposiciones). No en vano -y diría que con cierta malicia- se había elegido por Moscú el 9 de noviembre de 1989 como día para la apertura del muro, el mismo día que en 1918 se había convertido en el día de los traidores de la patria que firmaron el nefasto Tratado de Versailles. Foto: ¡Qué risas aquellas! Negociación en el Cáucaso en 1990. El Ministro de Asuntos Exteriores alemán Genscher alias IM Tulpe (su presunto alias como espía de los servicios secretos de Alemania oriental, vinculación nunca probada), Gorbachov y Kohl: ¿Quién traiciona a quién a favor de quién o, en general, quién traiciona a quién o el qué a favor de quién?

No suficiente con la traición de la patria, se presentó otra oportunidad para la traición de Prusia. No se anuló la disolución forzosa de Prusia como estado, ordenada en contra del derecho internacional por potencias extranjeras por hacer a Prusia -injustificadamente- responsable del régimen nazi, cuando todo el movimiento nacionalsocialista liderado por el austríaco Hitler, nacionalizado alemán de forma irregular, partía de Baviera y se servía de la estructura militar prusiana y una mentalidad prusiana de obediencia al poder para consolidar su régimen, con lo que se perdió otra oportunidad histórica para una jugada de gran estadista. En esta fecha, Alemania Occidental tenía una oportunidad única para reparar las injusticias históricas y ejercer presión sobre la Unión Soviética, que estuvo económica y políticamente en una situación de fuerte debilidad. El haber privado a todo un pueblo de su país y gran parte de sus tierras, que representaban cerca de dos tercios del territorio alemán de 1900, es algo que no se puede aceptar.

Por eso, 25 años después de la reunificación parcial en forma de una adhesión de un territorio parcial, es decir, de los estados centrales de Alemania, ha llegado el momento de reparar esta injusticia especialmente en el marco de la reforma del federalismo de Alemania y restablecer Prusia como estado. A la vista de que la República Federal de Alemania no tiene la voluntad de defender los intereses prusianos y las reclamaciones legítimas de los ciudadanos prusianos expulsados cruelmente de sus tierras, si no habían sido asesinados, sólo un estado prusiano -sea como estado federado de Alemania o como estado independiente- podría recuperar y defender la unidad estatal y nacional. Foto: Las negociaciones 2+4: ¿Polonia como potencia vencedora? En cualquier caso fue el país que más tajada ha sacado de la guerra, habiéndola instigado junto a Churchill ya durante los años veinte.
El vigésimo quinto aniversario de la caída del muro no es motivo para celebraciones, sino motivo para repensar la política panalemana de las últimas seis décadas y de someter la actuación de los representantes del pueblo -tan alejados del pueblo- a un juicio más severo. Alemania como nación unificada ha sido un fracaso desde que Bismarck dejó de ser canciller imperial.